Durante décadas la formación profesional en España no ha sido suficientemente valorada y aún a día de hoy sigue sin arrancar. Nuestro país tiene una de las peores tasas de escolarización en FP de todos los países industrializados, ya que solo el 12% de los alumnos están matriculados en la misma, menos de la mitad de la media de la OCDE (26%), y solo un 1% reciben el modelo de formación dual que combina enseñanza con trabajo.
Desde Juventudes Socialistas de España (JSE) apuntan a que “en un país con los niveles de paro juvenil a la cabeza de Europa no se pueden permitir las tasas actuales de Formación Profesional” y en este sentido, su Secretario General, Omar Anguita, indica que “los países con programas de FP, aprendizaje y capacitación laboral bien asentados son más efectivos contra el desempleo juvenil”.
En España el modelo de FP dual comenzó a desarrollarse en 2012, pero su nulo desarrollo normativo ha sido una de las causas de la actual descoordinación en el modelo que “está empezando a ser una fuente de precariedad”. Es por ello que desde JSE consideran que urge un replanteamiento del modelo de Formación Profesional, lo que pasa “por su mayor fomento e implantación en nuestro país”, para lo que desde la organización juvenil socialista apuntan a la implantación de las siguientes medidas:
- Armonización del modelo por Comunidades Autónomas, con el objetivo de asegurar unas mínimas garantías y condiciones laborales comunes para todos los trabajadores y estudiantes que se hallen formándose en España.
- Es necesario, asimismo, un plan específico para cada Comunidad Autónoma para adaptar la oferta formativa a las características productivas y socioeconómicas de cada territorio.
- Aumento de la dotación presupuestaria destinada al fomento de la FP Dual en los centros educativos así como en las propias empresas. No habrá una Formación Profesional digna y eficaz sin mirar a los dos lados de la ecuación: formación y empleo.
- Establecimiento de un organismo supervisor que se ocupe de evaluar la eficiencia del modelo y que supervise su cumplimiento de acuerdo con la legislación vigente.
- Promover la formación del profesorado con un plan específico en colaboración con las administraciones públicas, que permita la renovación de conocimientos y la adaptación a los nuevos entornos productivos y nos haga converger a nivel europeo.
- Impulsar la incorporación de España al proceso de convergencia europea de Formación Profesional y facilitar la movilidad transnacional del profesorado y alumnado de Formación Profesional.
Tras la presentación de las propuestas, el Secretario de Universidad y Formación Profesional, Ramón de la Cruz declaró que “las empresas deben entender que la FP no es un modelo para que puedan competir a la baja a través de precarios contratos de formación, sino que se trata de una oportunidad para competir en productividad por valor añadido”.
